El concejal socialista José Luis Ruiz ha criticado “la adjudicación directa de las barras de la feria de Villarrobledo a una empresa fuera de la localidad, concretamente de la provincia de Cuenca” tal y como dice que ya ocurrió el año pasado. Un hecho que consideran especialmente grave, protagonizado por el concejal Juan José Calero Gutiérrez, con la complicidad del alcalde Valentín Bueno, que se suma dice a una serie de actuaciones que los socialistas califican de “poco éticas o morales por parte de ambos, en las últimas semanas”.
Ruiz manifiesta que históricamente, estas barras han sido gestionadas por hosteleros locales, una práctica que buscaba fomentar la economía de Villarrobledo. Sin embargo, insiste en que ahora, Juan José Calero y Valentín Bueno “han optado por excluir a los empresarios de la ciudad, otorgando el contrato sin concurrencia competitiva a una empresa externa”.
El Grupo Socialista ha mantenido contacto con varios hosteleros de la localidad, quienes han manifestado su indignación y perplejidad ante esta decisión.
Según el responsable socialista, este caso evidencia que “el equipo de gobierno prioriza beneficios particulares y favorece a empresas ajenas a la localidad, en lugar de velar por los intereses de los ciudadanos de Villarrobledo”, incidiendo José Luis Ruiz en que “el pliego de adjudicación ha sido diseñado para favorecer a dicha empresa, asignándole tanto las actuaciones de la feria como la explotación de las barras, sin ofrecer opción a la participación de otros licitadores”.
Además, como ya se denunció el año pasado, circulan rumores sobre posibles vínculos contractuales entre los ediles y la empresa adjudicataria, por lo que exigen aclaraciones públicas.
Al edil socialista le llama la atención que, casualmente, los últimos eventos culturales de Villarrobledo —como el Bamboleo, las actuaciones de la feria o los DJ’s en carnaval— hayan recaído en la misma empresa foránea, moviendo miles de euros públicos, lo que afirma que genera sospechas.
Por todo ello, el Grupo Socialista exige explicaciones al concejal de Cultura, Juan José Calero, y al alcalde, Valentín Bueno, sobre las razones que han llevado a esta situación.
A juicio de José Luis Ruiz, este episodio no es aislado, sino que se enmarca en una sucesión de actuaciones cuestionables en las últimas semanas: como ha sido la presentación del concejal Calero a una plaza municipal mientras ejercía como edil y miembro de la Junta de Gobierno, en un proceso donde personal de confianza del alcalde formaba parte del tribunal.
El concejal socialista alude a la actitud agresiva del concejal del Gobierno en el pleno al ser interpelado, con gestos violentos y sin rectificación ni disculpas, mientras el alcalde minimizaba los hechos.
Por último señala la emisión de un comunicado, por parte del concejal Juan José Calero en el que alegó baja por salud mental debido a supuesto «acoso político», que contrasta con su presencia, días después, en un acto público multitudinario.
Ruiz quiso aclarar que, si bien es comprensible velar por la salud mental, resulta inadmisible que el edil alegara incapacidad para asistir a los actos de la feria, pero sí estuviera presente en las jornadas de la Cooperativa, rodeado de vecinos.
Esto sugiere, según Ruiz, “que su verdadero objetivo era evitar una pitada, como la recibida en el Gran Prix, durante la inauguración de le Feria”.
Para finalizar José Luis Ruiz ha indicado que todo ello demuestra que, en este gobierno, la ética y la transparencia brillan por su ausencia, primando el interés particular sobre el bien público. Por ello, el Grupo Socialista exige nuevamente que Juan José Calero y Valentín Bueno den la cara, dejen de evadir responsabilidades y expliquen estas decisiones ante la ciudadanía.
