Tras el pleno ordinario celebrado en la tarde de ayer, desde Se Puede Villarrobledo critican la “falta de seriedad” del equipo de gobierno y en concreto de la concejal Amalia Gutiérrez de quien Mario de la Ossa dice que “tiene una obsesión por él” tapando así dice, la falta de gestión y atacando a la que considera como “la única oposición” que existe en el Ayuntamiento.
De la Osa apunta que fue un pleno en el que se abordaron asuntos de todo tipo, alude al concejal Ángel Perea del que dice que “acaba con la participación” en Villarrobledo, algo que el concejal de SPV dice que su grupo no comparte abogando siempre por dar voz a los ciudadanos en la política local.
Por otro lado, afirma que la concejal Cristina García “emponzoña y envenena” el Pleno con una moción en torno a política nacional en lugar dice de la Ossa, de debatir sobre los asuntos que de verdad afectan a los ciudadanos y critica lo que considera como el afán recaudatorio de Amalia Gutiérrez sin estar de acuerdo en que la Cuenta General presentada ayer en pleno sea la mejor de la historia como afirman desde el Equipo de Gobierno.
Mario de la Ossa señala que echó ayer en falta una dimisión o cuanto menos una disculpa por el hecho de haber dado lugar a comenzar un nuevo curso con los extintores de algunos centros escolares caducados.
También critican desde SPV la falta de gestión en cuanto al control de la plaga de palomas que sufren los ciudadanos y en concreto dice, personas de avanzada edad.
Otro de los asuntos tratados en pleno fue el relacionado con el agua y apunta al respecto que los institutos tienen que realizar cortes de suministro porque no pueden hacer frente a las elevadas facturas, mientras el Gobierno Municipal señala que es a Junta de Comunidades la que tiene que asumir este gasto. Piden desde SPV que se paralice la modificación de ordenanzas hasta que se reparen los problemas en la red de abastecimiento de agua potable de los institutos.
Por último lamenta Mario de la Ossa la actitud del alcalde y sus palabras al decirle que “los tenía que tener bien puestos” para realizar preguntas en pleno. Una actitud que el concejal de SPV reprobó y le valió su expulsión del salón de plenos, lo que considera como un mal ejemplo y una mala imagen que se traslada desde la institución a los ciudadanos.